¿Vivir para escribir? ¿Vivir de la escritura? ¿Escribir para que sepan que existimos, para reafirmarnos en nuestra identidad? ¿Egolatría? Tal vez…Y una forma de conjurar nuestros demonios, de buscar la salida del laberinto, la solución del enigma.
Comunicación, reconocimiento, conquista, redención por la belleza, recreación del mundo a través del lenguaje, búsqueda y encuentro, playa para el naufragio, oasis en el desierto, superación, expresión, compromiso. Cada escritor esgrime sus razones. Pueden ser todas, algunas, o ninguna, de las que aquí yo apunto.
Escribir es siempre un acto de entrega, dialéctico o solipsista, pero entrega al fin y al cabo. En ese momento de introspección todo es posible, hasta la autocensura. Ser honesto es difícil, pero muy necesario. Huir de la afectación y la impostura, de la excesiva frialdad y el endiosamiento engolado y altanero. Ser auténticos, no venderse a la oferta y la demanda, no claudicar, no ofrecerse al mejor postor, no tener miedo de quedarnos solos. Porque es en la soledad donde nace la palabra, ese es su reino y su origen.
Quizá tengamos éxito, nos publiquen, nos lean, nos conozcan… Quizá nunca lo tengamos. Pero un día, al final, se apagarán las luces y sólo quedará lo que en verdad importa: la palabra. Ese diamante (más bruto o más pulido) que brillará en el centro de todas las ruinas, en medio de la soledad inabarcable a la que nos condena el paso de los años,el paso de las décadas, el paso de los siglos… Y así, en la palabra escrita, en nuestros textos, quedará lo que fuimos, aquello que dejamos. El latido, la voz y la memoria.
Es muy curioso, Marisa. Acabo de colgar mi entrada de hoy, leo la tuya y coincidimos en un punto: el afán de inmortalidad que mueve a todo escritor.
Precioso texto, se ve que amas la palabra.
Un beso.
Que bonito, Marisa. Creo que nos reconocemos en el otro, en su palabras, aunque no sean nuestras. La palabra tiene el fin inludible de pertenecernos solo por instantes, por que es el otro, que, al hacerlas suyas, no da toda la dimensión de nuestro instante de creación, y como dices arriba, a lo mejor subyace un sentimiento de egolatria, descubrir al creador. Y si queda lo que fuimos, tal como lo dices. Un beso enorme bella mujer
Gracias Jose Miguel, yo sé que tú también…Un abrazo
Jaud, gracias siempre por tus generosos comentarios.
Te mando un beso fuerte
Qué bien reencontrarte en este nuevo y bonito blog para seguir aquà tus versos y reflexiones.
Mi enhorabuena
Gracias Jesús por venir a este rincón de reflexiones y prosas, de silencios compartidos.Este fue realmente mi primer blog y le tengo un cariño especial.Un fuerte abrazo
Escribir por satisfacción personal, como desahogo, o por cualquier otro motivo es muy lÃcito, y también es un acto de generosidad hacia los que te leen, haciéndoles partÃcipes de tus sentimientos, de tus conocimientos, y en muchos casos de una gran belleza poética. Yo disfruto leyéndote.
Escribir es una bonita forma de comunicación, la palabra escrita siempre quedará ahÃ, para acudir a ella cuando nos invada la tristeza y la melancolÃa y necesitemos un remanso donde poder evadirnos. En otoño tengo sentimientos contradictorios, me gusta pero me entristece, en estos momentos no hay nadie a mi lado, y leyendo tus palabras no me encuentro sola.
Sabes que siempre te deseo todo lo mejor.
Un abrazo muy, muy fuerte, Marisa.
Me ha recordado a las preguntas que me hice después de «Cartas a un joven poeta» de Rilke. Maravilloso libro y maravilloso post: cuánta pasión!
Un saludo.
Ésa es la gran pregunta, Marisa. Es cierto, hay un instinto de conjurar a la muerte, pero hay también quien tiene la esperanza de un lucrativo negocio, claro que si sólo eso le mueve (y digo, sólo, porque no hemos de olvidar a grandes grandes como Balzac para quien el motivo económico era uno de los más importantes) no son escritores de verdad, ¿o sÃ? Me gusta la idea de que el escritor es el que tiene necesidad de decir algo que nunca consigue decir del todo…
Tengo enlazado un blog donde se han recogido los motivos de cientos de escritores. Por si te interesa
http://porqueescribimos.blogspot.com/
Un abrazo enorme.
Marisa, tu escribes porqué lo necesitas, necesitas escribir toda la sabidurÃa que llevas dentro.
A todos nos gusta que se no reconozca nuestro buen hacer, en tu caso llevas tanto dentro que es necesario que demuestres a todos lo que sientes, porqué contigo sentimos todos, contigo y tus palabras soñamos.
Yo humildemente escribo para vivir y vivir más.
para contar mis alegrÃas, mis sueños, mis carencias.
Te quiero mucho ,eres encantadora, dulce.
¡Vamos un cielo¡
Dejar palabra y con ello memoria, es vivir parasiempre, que palabra no es eterna?
Irene creo que escribir es una de las mejores cosas que cualquiera puede hacer. Ser un genio de las letras eso ya son palabras mayores, pero escribir, ser feliz haciéndolo y compartirlo con los que gustan de tu palabra, eso nadie puede ponerlo en duda.un besazo guapa.
Rilke es uno de mis referentes.En un post un poco anterior a este lo menciono.Hay que dejarse envolver por el entusiasmo, por la llama de la escritura. la pasión es un motor de vida.un abrazo Spender y un gustazo verte por aquÃ
El blog que me recomiendas es una joya Bel.Lo he estado leyendo y hay mucho, pero mucho que bucear…En fin, hay preguntas que forman parte de la eterna duda y siempre nos las seguiremos haciendo.un besazo guapa
Maria Luisa muy bien dicho, escribes para vivir, y para compartirlo con los que te quieren y para conocerte mejor y permitir que te conozcamos¿puede haber mejor razón? Un besazo guapa, te quiero mucho
SÃ Edu , es la única vida eterna :perdurar en la memoria…Un abrazo enorme
«Porque es en la soledad donde nace la palabra, ese es su reino y su origen.»
De esa soledad productiva nos alimentamos también nosotros.
😉
Un beso, Marisa
Gracias gemma…Te mando un beso enorme.
En la escritura, la regla es la carrera de resistencia, y la mayor prerrogativa es la soledad del escritor de fondo. Espejismos, mitos y medias falacias no sirven para llegar a otra parte, ni para ocultar la verdad. Escribir es un oficio solitario. Publicar y dar a conocer lo escrito no lo es: por eso estamos aquÃ.
Un abrazo.
Fernando, por eso estamos aquÃ, claro que sÃ…Un beso
Asà es como es; o, al menos, como yo quiero que sea.