La tarde del 4 de mayo acompañamos a Miguel Ángel Yusta en la presentación de su libro El camino de tu nombre. Un libro que nos reconcilia con la buena poesía, con la que sabe de dónde viene y a dónde va. Poesía profunda, auténtica, simbólica y como diría R.Darío «sentimental, sensible, sensitiva….».En Libertad 8 leímos sus poemas Laura Gómez Recas y la que esto escribe (Marisa Peña), y escuchamos a Jose Luis Gracia Mosteo trazar una magnífica semblanza de la sentimentalidad que sirve de prólogo a este nuevo libro del autor zaragozano.Merece la pena encontrarse con la poesía de Miguel Ángel Yusta, merece la pena recorrer el camino que lleva hasta ella.
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Y otra tarde de mayo volvimos a Libertad 8 a presentar el nuevo trabajo poético de Antonio Capilla, EL FUEGO EN LA PALABRA, Huerga y Fierro Editores, Madrid, 2012.
Presentamos el libro, junto al autor, Marisa Peña (autora del prólogo) y Laura Gómez Recas, que con una prosa exquisita y un saber hacer que siempre la acompaña, trazó una semblanza del autor que ya quisiera para sí cualquier autor que presente su obra en público.
«En este libro Antonio Capilla, poeta “fieramente humano”, nos entrega, como si de un nuevo don divino se tratara, el verso fraguado a fuego lento, la palabra poética heredada de los grandes maestros (Juan Ramón, Machado, León Felipe, Quevedo…). Y nos la entrega nueva, renovada, propia.
Una profunda filantropía emana de todos y cada uno de los poemas. Amor al hombre, amor a la palabra. El amor hecho verso, hecho poesía». (Marisa Peña)
«Es este un libro lleno de palabras rebosantes de humanismo y de una afilada filantropía que hace de su lectura un renacer a la fe en los versos como camino hacia el compromiso íntimo con lo exterior». (Laura Gómez Recas)
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Compartir poesía con buenos amigos, que además son buenos poetas, saben el oficio y a él se entregan con la pasión y el respeto que merece, es un lujo y un placer que me hace profundamente feliz. Que cuenten conmigo para formar parte de ello, como dice la publicidad, no tiene precio (pero sí un valor incalculable).