Todos tenemos lugares comunes: sitios a los que volvemos, canciones que nos llevan a espacios lejanos, a tiempos pasados, a lazos perdidos… Libros, poemas, refranes, frases hechas, películas, anuncios, proclamas, consignas, cantantes, actores, pintores, poetas…
A veces tenemos la inmensa suerte de poder compartir nuestros lugares comunes con aquellos que caminan a nuestro lado. Y nos emocionamos, y nos brillan los ojos en ese sencillo gesto de compartir lo que nos unió una vez, aunque ni siquiera nos hubiéramos conocido todavía. Los lugares comunes nos conducen directamente a la nostalgia por el atajo de la melancolía, pero también nos hacen reir y nos reconfortan. Por ellos reconocemos a nuestros amigos, a nuestros compañeros de viaje, y del mismo modo, a través de ellos, nos reconocemos también a nosotros mismos.
Qué bonito, Marisa, y cuánta verdad. Es la remembranza, que dicen los italianos. Me he acordado de Norma.
Un beso.
Eso nos lleva a la nostalgÃa,que a menudo caigo en ella,no es una nostalgia/tristeza ,pues disfruto en la remenbranza ,como dice Ridao.
Besos!
Cierto que muchas personas de la misma generación, o del mismo pueblo, o del mismo paÃs, nos sentimos identificados con algunos iconos de nuestra época. Serán lugares comunes del corazón. Besitos.
Jose Miguel, dafne, Isabel, gracias por venir a compartir esos lugares comunes»del corazón», como bien dice Isabel.Un enorme abrazo