Somos extrañas criaturas. A veces el cuerpo más frágil guarda un alma y una voluntad inquebrantables; y el armazón más fuerte, esconde un corazón, tan frágil, que se rompe fácilmente en cientos de pedazos irrecuperables.
Vivimos llenos de contradicciones irreconciliables, nos asaltan las dudas, aun creyendo estar plenamente seguros. A veces nos crecemos en el dolor y las penurias y , sin embargo, nos quedamos exhaustos tras un momento de felicidad, o de gloria…
Cada día es una victoria, un pequeño milagro que nos concede el tiempo. Pasamos por los días a una velocidad vertiginosa, no paramos, no escuchamos, no abrazamos, y , sobre todo, no damos las gracias. Agradecer supone reconocer al otro, hacerle ver que sabemos que está ahí y que valoramos sus gestos. Por eso no quiero dejar pasar ni un solo día más sin decir, a todos los que se lo merecen, gracias. A los que me alentasteis, a los que me acompañasteis en las penas y las glorias. A los que me habéis hecho saber que estáis ahí y que puedo contar con vosotros. A los que, desde el silencio, venís a leer a este rincón, y os marcháis de puntillas. A todos los que me habéis hecho confiar en el poder de la palabra, y en su capacidad de unir en la distancia con hilos invisibles de afecto y complicidad. A los que os fuisteis, a los que regresasteis, a los que nunca habéis fallado: os doy las gracias y os reconozco. Y ese sencillo gesto me hace sentir que, este noviembre, tal vez, sea menos frío…
celebro que asà lo sientas aunque nov. sea para mi el ems de la ceniza…un beso…
Gracias a ti, Marisa: por tu voz, por tu compromiso, por tu cercanÃa, por tu memoria, por todo.
¿Hace falta agradecer lo que se hace con tanto placer? Tu poesÃa, tu prosa, tus palabras, tus tristezas y alegrÃas, tu memoria, tus fantasÃas, forman parte de las mÃas, de las nuestras, de los que hemos pasado alguna vez y hoy te esperamos y buscamos, como a un dÃa de sol, como a una mano amiga, como a la palabra justa en el momento preciso, como una buena noticia, como a un sueño, como a un recuerdo feliz. Lo dice el artÃculo de Mertxe que acabo de leer: tocas el alma de tus lectores (hablo por mÃ, pero sé que lo que a mÃ, le pasa a otros), y tus versos nos rondan durante dÃas. No sé si alcanzas a ver los «desmanes» que provocan tus «criaturas», pero a mà me encanta que vengan a ponerme la casa patas para arriba. Amiga mÃa, tus palabras me toman de los tobillos, me levantan por el aire, me dejan cabeza abajo y me sacuden. Y lo más interesante es que cada vez me gusta más quedar tan desencajado. No las encierres nunca, no tengo dudas de que eso harÃa al mundo mucho peor de lo que es, y ya no habrÃa mes del calendario que pudiera soportar tanto frÃo.
Te saludo desde esta primavera porteña, que nos regala dÃas de 35 grados ¿Hay forma de hacerte llegar un poco de ese calor?
Te abrazo en el corazón.
Es difÃcil que noviembre sea frÃo en un rincón como éste. Tus palabras son cálidas siempre, incluso cuando narran esos episodios duros de triste recuerdo. Siempre hay calor en ellas porque se transparenta el corazón que las hace brotar. Un corazón de regalo todos los dÃas. Besos, querida amiga.
Gracias también a ti por ese compromiso constante con la poesÃa y con la amistad.
Un beso
Jesús
Gracias a ti, siempre, por tus palabras, tu compañÃa. Un abrazo enorme, querida Marisa.
Me encuentro reflejada entre estas personas, porque me gusta acompañarte siempre, en tus penas y en tus alegrÃas, estando aquà y aunque no esté, y no es necesario que des las gracias, en todo caso serÃan mutuas, gracias a ti también por dedicarnos y regalarnos tus palabras.
Muchos besos, Marisa.
Reconozco que soy sensible, pero tu te pasas con estos escritos que me derriban de puro amor. Que Dios te siga bendiciendo donde quiera que estes y ´por sobre todo…gracias a ti. Me encanta leerte en ese español que me descubre en mis clandestinos genes.
Yo reitero lo que han dicho los comentaristas anteriores. Tu puro amor, tu gnerosidad infinita, nos reconforta siempre que venimos por aquÃ. Asà que tus lectores te lo agradecemos de todo corazón. Un beso (o los que quieras: a tu disposición, siempre), amiga Marisa.
Ay Fernando, me soiento bien si pienso en lo que tengo, porque si pienso en lo que no he conseguido o en lo que dejé marchar…Un beso, guapo
Gracias Juan Antonio(te llamen como te llamen tu nombre es irremplazable para los que te apreciamos:))Intento ser honesta conmigo misma y escribir tal y como soy.Mis preocupaciones, mis obsesiones, mis dudas y mis emociones se hacen palabras.Aquà las comparto con los que llegan y agradezco esa inestimable compañÃa.
Un abrazo
Alejandro tú has sido mi «angel bueno» desde que te conozco.me has dado tantas alegrÃas que no habrÃa blogs suficientes para agradecértelo.Sé que estás ahÃ, leyendo y compartiendo y eso me enorgullece y me reconforta.Un abrazo enorme, queridÃsimo amigo
Isabel, gracias…Estoy deseando leer tu novela.A ver si los reyes magos son buenos y me la traen:))¿Vendrás por madrid a presentarla? Bueno guapa gracias por tu afecto y tu compañÃa.
Lo mismo te digo jesús…y gracias por estar aquÃ.
Bel, tus palabras siempre me hacen sonreÃr y significan mucho, mucho para continuar.besos
Jaud, querido amigo, me emocionan siempre tus afectuosas palabras.gracias por estar aquà siempre.Un beso
Octavio…¡qué alegrÃa! sabes cuánto aprecio tus palabras y tu lectura y tu presencia.gracias por haber venido aquel dÃa y por seguir viniendo todavÃa…Un beso
Irene, tú eres una de mis lectoras incondicionales y sabes cuánto te aprecio y te quiero, guapa.Un abrazo enorme
«los que, desde el silencio, venÃs a leer a este rincón, y os marcháis de puntillas. A todos los que me habéis hecho confiar en el poder de la palabra, y en su capacidad de unir en la distancia con hilos invisibles de afecto y complicidad».
Yo soy de las silenciosas, a veces ni dejo rastro, Marisa, pero siempre estoy ahÃ.
Besos,
Marta
Gracias marta.Significa mucho para mà que me lo digas. A veces el desánimo anida en el corazón y una cree que lo que hace no tiene sentido…besos guapa
Gracias a ti por ser como eres, porque hay muy pocas personas tan speciales como tu.
Mil besos tk
Gracias a tà Marisa,por compartir tantas cosas hermosas con todos nosotros.
Creo que te he dicho muchas veces, lo identificada que me siento con todo lo que escribes.. tus poemas… tus textos, son imprescindibles para mÃ.
Muchos besos querida Marisa
CREO QUE, MÃS QUE LO QUE TE PUEDAN HABER AYUDADO LOS DEMAS, TIENES QUE AGRADECER LO QUE HAS CONSEGUIDO A LA FE QUE TIENES EN EL PODER DE LAS PALABRAS. DESDE QUE TE CONOZCO ESTA FE HA SIDO BASE Y MOTOR DE TU VIDA.